El grupo canino vasco de rescate con sede en Elorrio, interviene en cada año en cerca de una veintena de búsquedas de personas desaparecidas, las últimas en las poblaciones de Urkulu y Markina donde se perdieron una joven de 17 años y un octogenario, respectivamente. Los dos, encontrados sanos y salvos tras varios días de rastreo. Estos trabajos se llevan a cabo gracias al convenio de colaboración entre esta asociación fundada hace casi cuatro décadas y SOS Deiak. En todas las activaciones cada minuto es vital, y aunque en el 80% de los casos las víctimas son halladas por otros agentes, los trabajos de los canes es crucial, sobre todo para «descartar zonas muy complicadas y de difícil acceso», explican desde la asociación.
El grupo entrena cuatro días a la semana en sus instalaciones de Elorrio a fin de estar dispuestos en todo momento para su activación. Los fines de semana son aprovechados para desplazarse a escenarios diferentes, José Valderas afirma que «es necesario que los perros varíen de escenarios para no acomodarse y para que, además, conozcan cada bosque de Euskadi ante posibles búsquedas».
La pandemia también ha dificultado los trabajos de las unidades caninas de rescate, que aunque no han detenido del todo sus entrenamientos, no han podido retomar las pruebas hasta estas últimas semanas. Este fin de semana es uno de los mas importantes, sus once perros se someten al control de carácter anual ara certificar que son válidos para las búsquedas ante la Organización Internacional de Perros de Búsqueda y Rescate IRO. Estas pruebas son garantía de un trabajo bien hecho, binomios de primer nivel, siendo uno de los pocos grupos que realizan estas pruebas de homologación.
Un juez internacional será el encargado de valorar al binomio, perro – guía, a través de tres pruebas donde muestran su potencial, entre ellas se puntuará la obediencia, trabajos de búsqueda y rescate en grandes áreas y búsqueda en cantera.
José Valderas y «Crixo» subcampeones de España en estructuras colapsadas
Entre los binomios participantes se encuentran ‘Crixo’, un pastor belga malinois de 4 años, y su adiestrador José Valderas, juntos acaban de proclamarse subcampeones de España en la modalidad de estructuras colapsadas, donde se evalúa al perro en derrumbes o corrimientos de tierra. Una prueba que se desarrolla con un tiempo máximo de 15 minutos y distracciones de todo tipo, como ruidos, comida, humo o juegos, el objetivo que encontrar a cuatro víctimas entre escombros. Una de sus últimas activaciones fue durante los trabajos en el derrumbe del vertedero de Zaldibar, durante las primeras horas antes de suspenderse las labores por posibles riesgos.
Por último reseñar que la asociació
