Perros duales o de doble propósito – Introducción
Dentro de la disciplina de búsqueda y rescate disponemos en cuanto a los ámbitos de especialidad en la detección dos tipos de perros KSAR, aquellos que están formados en un solo propósito (ya sea personas vivas , restos humanos o cadavéricos, perros de rastro con olor de referencia, perros de restos humanos en aguas estancadas, perros detectores de personas vivas en aludes o corrimientos de tierra, perros detectores en personas vivas en aludes de nieve…) Se comprende que el propósito de búsqueda está más relacionado con su especialidad en la formación más que el elemento de detección o COV (compuesto orgánico volátil).
En el proceso de formación en relación al perro que escogeremos para esta especialidad obviamente buscaremos cualidades específicas en este tipo de formación. Este tema que adquiere tintes cognitivos (carácter y psicología del perro) es propio de otro artículo y no por ello menos importante.
El perro de un solo propósito es el perro de trabajo KSAR es el más habitual, las razones que llevan a adoptar este sistema formativo es falsa sensación de garantías en la detección (los instructores que niegan la posibilidad de perros duales refieren habitualmente que el perro de un solo propósito es mucho más fiable en la detección).
El perro en su proceso de formación lo podemos formar en doble propósito, en este sentido podemos formar a un mismo perro en dos especialidades de trabajo distintas. Dentro de estos doble propósitos los más habituales son:
- Perro de doble propósito en zonas agrestes y grandes áreas. Sobre esta especialidad mucho instructores defenderán que es un solo propósito, sin embargo yo defiendo que su proceso formativo es distinto, en los tipos de emanación de olor por la diferencia de escenario, las exigencias de propiocepción en el desplazamiento (salvo que hablemos en zonas agrestres de alta montaña donde las estructuras a superar son de gran exiencia), la profundidad del trabajo es muy distinto, las estructuras a superar son muy distintas, en muchas ocasiones en zonas agrestres el perro confirma a vista con la victima mientras que en estructuras colapsadas normalmente pasa todo lo contrario (únicamente se apoya por cono de olor).
- Perro de doble propósito en personas vivas y restos humanos (REHU). En este caso hablar de doble propósito es incorrecto, bajo mi punto de vista y respetamos la amplitud de la afirmación estaríamos hablando de perro multipropósito, es decir perro que tienen múltiples formaciones para tipo o subtipo especifico de formación.
En este sentido normalmente los instructores que diseñan perros de doble propósito lo hacen pensando en qué escenarios van a trabajar de forma más habitual y es por ello que dentro de este tipo de doble propósito el más habitual es el perro de doble propósito en zonas agrestres en vivos y en restos humanos en fase de fresco o cromática y en fase de putrefacto o enfisematosa en superficie.
Esto no quiere decir que no hayan más configuraciones de este segundo tipo, tanto la formación en dual o doble propósito como en detalle qué dos propósitos que lo componen a nivel formativo marcaran el desarrollo del perro KSAR.
En definitiva el perro de doble propósito confiere las mismas garantías de resolución siemre y cuando este bien formado en los propósitos que lo integren y tiene la misma predisposición a cometer errores en la detección como son los falsos positivos, la inducción al marcaje positivo, la tolerancia al estrés en la señalización, y otros aspectos que interfieren en el desarrollo de trabajo de búsqueda.
El perro de doble propósito adquiere en sí mismo una economía a nivel logístico que es ventaja en el trabajo en zonas donde no disponemos de todos los recursos que disponemos o en equipos o binomios de bajo coste en donde no se dispone por imposibilidad económica.
